101 Jaguas Mercado


Tienen manchas también como los dálmatas. Para mí que son mucho más inteligentes. Están muy bien entrenados, preparados para sobrevivir hasta la más densa de las catástrofes. Se dice que las cucarachas serán las únicas sobrevivientes de la gran destrucción global del fin de los tiempos finales para finalizar este final. Yo les aseguro, que van a vivir sólo unos minutos después del colapso; porque de alguna de sus cuchas, los 101 Jaguas Mercado, saldrán para comer lo último que queda a su alrededor…lástima por ustedes, “eternas” insectas. ¿Cuál será la próxima merienda de los cuadrúpedos después de eso? No sé.

Bueno, la verdad que podría inventar hasta la cena, o porque no, el desayuno del día siguiente, o cómo seguirían viviendo para volver a poblar el mundo. También les intentaría dar otro nombre, ya que no existirá más el mercado.

De eso se trata este espacio. Inventar, escribir, borrar, inventar otra vez, escribir y cantar. Cantar y bailar. Sudar y estornudar. Escribir lo que sale. Lo que viene. Lo que no pude decir, y lo que ahora digo: Se pueden ir todos a la mierda. Al mejor excremento de todo el universo. A ese, que tanto queremos ir cuando todo se va, pero a la puta. Pueden comerse todos los mocos de la nariz o salir en bolas a correr. Hagan lo que quieran. Tomen todo el vino que estaban guardando, el whisky, o simplemente, esa cerveza que sobró de esa fiesta que juraste que nunca ibas a volver a tomar. Anímense a bailar lo más hasta abajo que pueden, a no bañarse todo un fin de semana y a comer galleta con coca, o a esa persona que tanto pega y se hace la ñembotavy. Este Blog llegó a las 101 visualizaciones, y tranquilamente podemos dejarnos contagiar por toda la euforia delanaada. Acá, por ejemplo, decidimos renunciar a nuestros laburos, con la esperanza de que este lugar virtual nos dé de comer. Como “el secreto” de la ley de atracción suena muy convincente, optamos por sólo dedicarnos a desear varios sponsors. Nos pasamos visualizando e imaginando interactivos “banners webs”, links de interés, facturas, llamados y un auto nuevo. Una casa. Un Yate y un Jet, claro. Tal vez a muchos de nuestros queridos lectores, cuando suceda eso, les moleste tanta publicidad, comentarios y diversidades varias ?¿ Por favor tengan en cuenta que son cosas del oficio. Tranqui. Si no quieren no hagan clic, ni acepten caramelos de extraños.

Muchas gracias a las personas que entraron un flash a curiosear, a esas que se quedaron leyendo sin entender lo que estaba pasando, y por supuesto, a todos los que siguen de verdad a lanaada. Un agradecimiento especial para mí, ya que soy la campeona de las visualizaciones. De las 101, 50 son mías… no podía dejar de ver como el contador del perfil iba sumando. Es taaaaan emocionante. Vos sabés, ¡cómo te esperaba! ¡Sólo vos sabés! A todo esto, ¿existirá algún sistema aplicable que no me cuente como visualizadora? Si existía, no íbamos a estar celebrando en este día. Mejor dicho: “si pillaba que existía”. La verdad que no calienta tanto.

Se supone que esto tiene que ser divertido por tratarse de una fiesta. Pero no se me ocurre ni un chiste para contarles, y si se me ocurre, no va a pegar para naada. Sólo me queda despediros, sin antes entregarles la sorpresita. Como saben, acá se escribe a partir lo primero que viene a la cabeza. El que se anime, que tire esa primera frase. Sólo una oración. Ahí donde dice comentarios. El próximo post será hecho con eso. Ahh, y si no entendiste lo de los 101 Jaguás, yo tampoco… ¿Gua´u que siempre entedés el guarará de tu cabeza? Mi intención fue hacerle un pequeño tributo a los visualizadores. Por favor, si vas a tirar una frase, que no sea tan cualquiera como esa.¡Gracias!

Porque bailando se entiende la gente

Esta madrugada ensayamos con un pequeño ladrón, más conocido en el ambiente como “pirañita”, una súper coreografía que dejó a más de 30, boquiabiertos. Con las palmas para arriba saludamos a todos y moviendo la cabeza de un lado para otro pedimos a los curiosos que se abran de una vez, y dejen de armar tanto escándalo por 1 pantalón y 2 corpiños. Con pestañeo para abajo, pestañeo para arriba intentaba entender lo que pasaba. Y lo único que entendía, hasta ese momento, era que un mitaí de 11 años llevaba en su mano mi ropa interior y otra prenda que no reconocía tanto. Más que piraña era un ave de ropiña =?

¡Qué alivio para todos! Hace como 2 meses que los tendederos son tema de conversación en el barrio entero. Después de la segunda desaparición, se creó la comisión garrote. Y… luego de varios fracasos y 3 presidentes renunciantes, la organización sin fines de culto, decidió disolverse amistosamente en un asado de clausura, que tuvo como saldo 2 heridos con arma blanda y 4 con arma de juego. Estaba clarísimo que eran un kilooooombo, y no les quedaba otra que dejar la cuestión en manos de Ña Crispina. La tarotista del barrio. Solterona y bien maquillada. Hija de un profundo touch and gou entre el difunto despensero y la “quien sabe donde” gitana del botánico. Más que despensero era un picaflornitro. Nunca antes descuidado, hasta el día en que aquella forastera llegó para comprar cigarrillo suelto, y él como gran cortejador, le ofreció degustar la galleta que reciencito nomás le trajo su repartidor. “Mirá nomás como suda toda la bolsita. Nada ningó no te va a hacer un pedazo de pam. Dale, metele nomás. ¿Con fiambre no querè? Ese te va a llenar bien."

Y definitivamente, era cierto. Durante 7 meses más se vio bien cargadita hasta que llegó la pequeña, adaptando el nombre de su padre: Crispinita. Luego de 2 meses en la incubadora, y de repetir 5 veces el tercer grado; decidió estudiar magia blanca, negra, rosa y parda. A los 17 recibió el PHd en adivinación. A los 40, luego de viajar alrededor de todo el mundo dando charlas y prediciendo grandes eventos como la guerra tibia y la llegada del chupacalas a la tierra, fundó su Call Center. Ya era muuuy famosa. Salía en la tele y tenía un feroz anuncio en el diario. Todos en algún momento del día coreaban su canción que se escuchaba : "...Llamá al Tarot y olvidate..." En su patio trasero, se alzaba una estructura gigante que sostenía el cartel más grande de la región:

Curamos todos tus males
Llamá o visitanos.Estamos acá, abajo.

Con sólo discar el “0”, accedés al paraíso.

*Los precios incluyen IVA.

Si podía hacer todo eso, y también tener una línea exclusiva como esa, era la persona indicada para resolver el misterio. Luego de aceptar el cargo que le ofrecieron los garroteadores, a través de una campaña mediática, convenció a todos de que Ao ao estaba en nuestro barrio, y era el responsable de los robos de ropa. Gracias a eso, se encontró una solución. Un piolín comunitario. Rodeada de guardias privados y un gran círculo de sal fina, la plaza, daba lugar a los trapos de todo el vecindario: desde el bajo, hasta la manzana “chic”. "Todos a la plaza a colgar sus ropas si no quieren que Ao ao les venga", era el mensaje de Ña Crispina.

Por suerte no andaba leyendo el diario, mi tele se quemó y nunca estuve ni ahí por subir la mirada y leer el gran cartel de Ñacrispi para ver la promo espiritual del momento. No estaba enterada de que tenía que llevar mi ropa al piolín más largo de la historia. Sin querer, esa noche, me quedé en la vereda bebiendo. Pude ver como, en mi cara, el ágil “raterito” tiraba las pinzas en el suelo y corría sin saber que en frente, en la oscuridad, tenía un pozo con cal. Al fin de su tremendo grito, todos estaban frente a mi casa, viendo como un mediano cuerpo, teñido de blanco, daba pasos balanceándose de un lado a otro.

¡El Ao Ao! ¿¿Vieron pa?? ¡Ahí está! Crispina estaba muy orgullosa. No paraba de dar brincos en una pata en releve.